sintiendo Bali, Java y Bangkok. 1º día: El tránsito

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Y llegó el 02/07/2013, y con él, los agobios del último momento, comprobar que lo llevamos todo en los maletones:

Ropa cómoda, calzado cómodo, bikinis/bañadores, neceser con una variopinta sección de cosméticos, botiquín básico (antidiarréicos, antiinflamatorios, paracetamol,
algo para dormir, repelente contra los mosquitos por ejemplo relek extraforte, productos para aliviar picaduras, escoceduras, ampollas…), cremas solares
protección total es decir del 50 o más, los pasaportes actualizados, dinerito y como no…, las vacunas! sí, porque para viajar a Indonesia y Thailandia,
se recomienda ir vacunado del tifus, la hepatitis A, y por supuesto llevar al día las vacunas como el tétanos o la hepatitis B, vacunas que a la mayoría
almenos nos han ido poniendo en la infancia en el colegio. A parte de informarse sobre la Malaria, porque depende de donde viajes de Indonesia y Thailandia,
te recomendarán que tomes profilaxis.

Para el tema de vacunas, si sois de españa, podéis consultar la página de Centros
de vacunación internacional
donde encontrareis los distintos centros a los que podéis dirigiros para informaros y vacunaros. Os recomiendo que lo hagáis
con tiempo ya que necesitáis pedir cita y podéis encontraros con que estén todos los días cogidos hasta pasada la fecha de vuestro viaje. A nosotros nos
pasó con uno de los centros que te visitaban y vacunaban gratis, obviamente a un mes vista de nuestro viaje, ya no había días disponibles. Además, pensad que hay vacunas que necesitan cierto tiempo para hacer efecto, en el caso del tifus por ejemplo, creo recordar que eran unos 10 días así que, ¡no os arriesguéis!
Bien, una vez comprobado que lo teníamos todo listo, tocaba ir al aeropuerto a coger nuestro avión de Qatar Airways destino Doha, que salía a las 15:55.

Han sido algo más de 6 horas de vuelo pero os aseguro que se me han pasado volando! el avión muy bien, de estos que tienes tu propia pantalla individual con tu mandito,
asientos bastante cómodos para ir en clase turista, con almohada y mantita y como no, con un buen servicio de comida o almenos yo he comido la mar de a
gusto, comido y bebido! porque no paran de traerte que si refrescos, un snack, luego la comida, luego el café/te, luego más bebida, un sandwitch…. y
sí, la comida ha estado muy rica! ya con toques orientales, arroz con pollo al curry, una ensalada… y por ir de luna de miel, un azafato la mar de encantador,
Vicente, nos ha obsequiado ni más ni menos que con 4 cajitas de bombones Godiva, 4 copas de cava (2 de rosado y dos normales), una colonia y para mí, una rosa.

A las 23:25 hora local (1 hora más que en España), hemos llegado a Doha, capital de Qatar, en pleno oriente medio, ¡ya en Asia!

Llegando a Doha

Al aterrizar, nos han llevado al lounge especial para gente con
necesidades especiales a esperar nuestro siguiente vuelo.
Para el traslado a la terminal, nos han venido a buscar de la asistencia del aeropuerto a nuestros asientos del avión que como es habitual, hemos salido los últimos y han utilizado el coche elevador para bajarnos del avión y el típico microbus para acercarnos a la terminal.
Algunos os preguntaréis qué es el coche elevador, pues Juanjo nos lo cuenta:

Un coche elevador es un artefacto ciértamente curioso.
El proceso de desembarcar del avión fue el siguiente (imaginad la cara que se nos quedó a nosotros cuando nos montaron allí):

  1. Salimos del avión, y en la puerta, en lugar de haber un pasillo o finger, o una escalera, nos encontramos un habitáculo enganchado a la puerta en el que nos montamos. A priori, parecía una especie de coche, en el que nos hicieron sentar como para dar un paseíto. ¡Todo sin bajar ni un minúsculo escalón!
    – ¡Qué coche más alto! – reconozco que pensé.
  2. De repente, el cacharro comenzó a descender, hasta que se detuvo. Y pensé:
    – ¡Ah! Ya ha bajado desde la altura de la salida del avión, y ahora ya nos iremos en esta cosa hasta la terminal.
    ¡Pues no!
  3. Luego, nos hicieron levantar, y salir a otra plataforma, enganchada al coche, que también comenzó a bajar, hasta que se colocó a ras de suelo.
  4. ¡Y después, a otra furgoneta hasta la terminal!

Todo este proceso debió tardar alrededor de tres minutos.
He de decir que si realmente aquello solo servía como elevador, no entiendo por qué los asientos tipo coche y demás. ¿Por qué no una plataforma sin más?
Y otra pregunta: ¿Por qué con dos personas ciegas hacen semejante gasto de tiempo y personal para bajar del avión, cuando tenemos una maravillosa escalera por la que bajar?
Es lo que tiene que metan en el mismo saco de protocolo a todas las discapacidades, imagino.
¡En fin! Que se me ha hecho larga la cita! 😉

Una vez acomodados en el lounge en cuestión, (hay que ver cuanta gente con necesidades especiales hay! y a esas horas…), nos hemos conectado a la WiFi del aeropuerto y nos hemos dispuesto a pasar las 3 horitas de escala.
A las 02:25h, por fin, nuestro vuelo destino singapur ha despegado con nosotros sentaditos en la ultimísima fila de la nave, en la cola cola.